LA GACELA

LA GACELA

Perdida:
Oteando nerviosa la sabana
entre olas de verde marfil,
no soy nada sola,
ahuyentada por pantera
me falta la manada.

No tengo quien me ampare
¡ no puedo moverme!
petrificada entre tanta ola verde
me estremezco de pavor,
sé, me está observando
echarme la zarpa en cuanto pueda
agazapada entre la hierba;

no me llega su aroma
sabe protegerse
el viento la favorece.

Se nubla el cielo que me cubre
en revuelo de alas,
potentes graznidos.....
¡ Dios mío ! estoy perdida
mi debilidad es tanta....
atrajo a los buitres carniceros
que rondan mi cabeza como fieras,
y...comerme viva quieren:

se me hincan las patas
ante el enemigo potente....
mi cabeza toca tierra
oigo tambores en lejanía, noooo
manada de elefantes se acerca
a todo correr, trompetas en alto,
música de serafines
suena en mis oídos
sus gritos de espanto,
perseguidos por jauría de cazadores
irrumpen a mi lado,
caigo redonda a tierra
cubriéndome la hierba
disimula mi presencia.

Ante mi, un gran espacio:
La hierba aplastada llora su esbeltez
perdida, bajo el paso de paquidermos;

nada en mi alrededor,
levanto mi cuerpo de tierra, con temor,
en el horizonte diviso mi manada
voy hacia ella aunque débil
poco a poco voy llegando
¡ albricias! ante mi olisqueo
buenos brotes, agua clara,
¡ bendito manjar me espera!,
nunca el cielo tan hermoso,
la sabana tan tierna me pareciera.

Leonor Rodríguez Rguez