Durero, Melancolía. Vuelven las horas muertas
entre ataques de neurosis
vendavales de ansiedades
de maniática estrañeza.
Mente obtusa me acorrala
entre callejones sin salida
se aceleran los impulsos
ausente voy por la vida.
Entre zarzales y abrojos
corren manantiales de recuerdos
que me hieren, que me irritan
propagando tensiones que incitan:
Odiar a la esperanza
sumamente remisa
que se cumplan añoranzas
dentro la confianza soñadas;
recogerme en monasterio
en vida contemplativa
no tener más pensamiento
que rezo para el universo.
Leonor Rodríguez Rodríguez.
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