domingo, 26 de julio de 2009

DEDICATORIA



Lo dedico a mis amigas, amigos blogueros, en especial a mis dos primeros oficiales de rango superior
Ana Lucía Montoya Rendón y Lidia Raquel Pistagnesi.
Gracias a todos, amigos, amigas, abrazos efusivos.
Leonor.



Fui barco sin rumbo, navegué muchas millas
por mares inmensos de mi entendimiento.

Atraqué en puertos selectos
llenos de luz, amor, alegría
que llenaron mi mente de jardines pintorescos.

Otros puertos me recibieron
con tormentas y rayos del averno
que con mi destreza y el capitán que llevo dentro
he conseguido librarme de ellos.

Salí a flote en momentos borrascosos
cual sombra que me tragaba
en la profundidad del mar abierto.

Ahora soy viejo barco
mi casco bien cuidado
invita a tripulantes no dejarlo
en el vertedero.
Esta nueva tripulación
de navegantes dicharacheros
está dejando mi interior tan lúcido y claro
como cielo azul en el universo.

Está todo a punto
las pruebas ya practicadas
por dos oficiales de alto rango
han dado el visto bueno
el resto la tripulación, de acuerdo.

Majestuoso me siento con esta tripulación
de altos vuelos
que me ayuda en mi vejez
a compararme con ellos.


Leonor.

3 comentarios:

CANTACLARO dijo...

Leíto, es un honor que nos haces a todos/as con este bellísimo y
sentido poema. De mi parte lo recibo en el corazón y allí quedará por
siempre. Sin embargo, la persona que merece reconocimientos eres tu
por el empeño que has puesto en intercambiar vivencias de forma tan
dinámica, tan cariñosa con tantísima gente que hoy te reconocemos por
tu hacer. Tu aguerrida forma de ser y entender el diario vivir te hace
como eterno, elegante y ágil barco que surque los siete mares porque
siempre ves claro tu norte. Tienes esa amplitud que solo poseen
personas de altos vuelos. Lo que conozco de ti me da pie para aseverar
esto que digo. Te lo ganaste desde siempre y es por eso que donde
quiera que vayas te reconocen los que saben de sensibilidad, como
también lo han hecho aquellos que se han beneficiado de tanta tenzón
que tú y otros han puesto desde tantos años atrás hasta hoy por lograr
beneficios para personas necesitadas.

Reitero mi cariño y admiración por ti, querida amiga del alma.

Afectuosamente,

Ana Lucía

CANTACLARO dijo...

Leíto, es un honor que nos haces a todos/as con este bellísimo y
sentido poema. De mi parte lo recibo en el corazón y allí quedará por
siempre. Sin embargo, la persona que merece reconocimientos eres tu
por el empeño que has puesto en intercambiar vivencias de forma tan
dinámica, tan cariñosa con tantísima gente que hoy te reconocemos por
tu hacer. Tu aguerrida forma de ser y entender el diario vivir te hace
como eterno, elegante y ágil barco que surque los siete mares porque
siempre ves claro tu norte. Tienes esa amplitud que solo poseen
personas de altos vuelos. Lo que conozco de ti me da pie para aseverar
esto que digo. Te lo ganaste desde siempre y es por eso que donde
quiera que vayas te reconocen los que saben de sensibilidad, como
también lo han hecho aquellos que se han beneficiado de tanta tenzón
que tú y otros han puesto desde tantos años atrás hasta hoy por lograr
beneficios para personas necesitadas.

Reitero mi cariño y admiración por ti, querida amiga del alma.

Afectuosamente,

Ana Lucía

Leonor Rodríguez Rodríguez dijo...

Gracias, mi amiga del alma: Repito,
me gusta mucho tu escrito, pero nos conocemos, se lo que sientes, no hubiera echo falta te hubieras alargado tanto.
Besos y abrazos
Leonor.